El Festival contó con diferentes instancias de encuentros: un laboratorio, muestras escénicas y los debates.
En el laboratorio donde investigamos la horizontalidad y trabajo colectivo, el primer reto al que nos enfrentamos fue, literalmente, armar entre todos el suelo sobre el cual trabajaríamos... Hoy lo pienso y me río porque me parece profundo, simbólico y tan básico a la vez.
Compromiso y respeto, fueron dos palabras que se volvieron fundamentales donde nos planteamos cómo queremos trabajar. La dificultad de ser honestos para decir no, para comprometerte con tu si, y que valga de verdad. Que tenga peso y sea real.
Las muestras, como siempre, fueron una degustación de los diversos modos de crear en las artes escénicas y a la vez enriquecernos con la mirada del público.
Los debates posteriores, se dieron en un marco muy relajado e informal facilitando la expresión y comunicación entre los creadores y allegados, generando espacios de mucho intercambio, reflexión, con la invaluable motivación que genera el compartir pasiones.
Este encuentro se dio en la escena, se dio en los laboratorios, en los preparativos, en las comidas, en los debates, en las cervezas, en los silencios, en lo que nos angustia y sobre todo en lo que nos mueve. En construirnos al ofrecer y recibir soporte.
Tal como lo deseaba al crear este festival, para mi fue un espacio de mucho crecimiento personal y profesional, de encuentros con colegas, amigos, mi danza y mi acción social.
Me sorprendo al observar como en todo el festival las personas que más se involucraron dando fueron las que más parecieran haber recibido a cambio. Y resuena una frase de Jodorowsky: lo que das, te lo das, lo que no das, te lo quitas.... Y agradezco a todos, los que en diferentes medidas hicieron posible ofrecer(me) tantos encuentros.
Eva Yufra
Los invito a ver más del proyecto en la página web: https://encuentrosfestival.wordpress.com/
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